Mario, persona que ha sabido conectar los valores que le ha inculcado ser instructor del arte marcial del Karate, con los tiempos modernos en los que vivimos, además de entrenador personal durante más de 24 años.
Se aprecia en él que ha adquirido de la filosofía del Karate un interior y exterior sencillo y humilde, a la vez que ha aprendido "a purgar de uno mismo los sentimientos egoístas y malos. Porque solo con la mente despejada puede uno entenderse, así como el conocimiento que recibe"(maestro Funakoshi).
Es un hombre de personalidad firme, coherente y directa, persona inquieta intelectualmente, generador de opinión y con una gran experiencia en la vida.
Se aprecia en él que ha adquirido de la filosofía del Karate un interior y exterior sencillo y humilde, a la vez que ha aprendido "a purgar de uno mismo los sentimientos egoístas y malos. Porque solo con la mente despejada puede uno entenderse, así como el conocimiento que recibe"(maestro Funakoshi).
Es un hombre de personalidad firme, coherente y directa, persona inquieta intelectualmente, generador de opinión y con una gran experiencia en la vida.
Por sus enseñanzas hemos
pasado y seguimos pasando miles de personas, desde estudiantes hasta jubilados,
desde emigrantes hasta inmigrantes y de policías hasta …, pero todos queremos
lo mismo, mejorar físicamente. Como no, en ese microsistema de interacciones
donde siempre estamos juntos, es inevitable desvelar algo de nuestra
personalidad, y Mario esta en un puesto privilegiado para observarlo.
Cualidades estas que se dan,
para que me haya interesado en indagar su opinión sobre el misterioso mundo de
la Criminología.
Antes de empezar a
conversar sobre lo que opina de la Criminología, me doy cuenta de como es el
tipo de persona que tengo delante.
- Algo intranquilo por lo
extraño de la situación le pregunto. Mario como quieres que te presente ¿Como
Maestro de Karate?
A lo que me respondió
tranquilamente:
“Isaac, mejor no pongas Maestro de Karate, todavía si
llevara 75 años enseñando, pero esos son Gurús, los demás somos meros
instructores”.
Gracias Mario por la
primera lección de humildad.
Después de esta pequeña anécdota empezamos a
conversar.
- Bueno Mario, estas conversaciones
nacen por mi afán hacia la Criminología, como introducción según García Pablos
de Molina, la Criminología es una ciencia empírica e interdisciplinaria, que
tiene por objeto el estudio del crimen, la persona infractora, la víctima y el
control social del comportamiento delictivo, para intentar averiguar la génesis
o dinámicas de este comportamiento, que ayude a la prevención del delito y al
tratamiento de las personas que lo cometen, para así integrarlas en la
sociedad.
Dicho esto:
-Me gustaría saber Mario ¿Qué opinas sobre el
misterioso mundo del crimen?.
-Hola Isaac. Creo que son varias las cosas que
influyen para que una persona pueda llegar a ser un delincuente, la familia, sus
amigos del barrio, su vida…
Por seguir un orden
empezare por el ambiente familiar. Pienso que el ambiente donde se cría una
persona es básico. Si la violencia, las drogas, ect… ya ocurre dentro del
ámbito familiar, eso va creando una personalidad que en un futuro puede
favorecer a ser delincuente, pero cuidado, sobre todo, si tienes este
ambiente en casa y sales a la calle y eliges el lado contrario, tienes todas
las papeletas para ser delincuente, diez de diez.
Esto me hace enlazar con el
siguiente punto fundamental, como es la influencia que tienen en las personas
las amistades con quien nos relacionamos, diré de esto, que siempre llega un
momento en el que la vida te da dos opciones, o elegir unos amigos de un lado o
otros de el otro lado, como te equivoques… puedes encarrilar tu vida hacia
donde no debes.
Mira Isaac, te voy a contar
una experiencia. Hace tiempo tuve un amigo que su familia era bastante normal,
incluso su padre Guardia Civil y su hermano Policía Local, esta persona empezó
a estudiar Derecho en la Universidad, poco después se junto con un grupo de
gente que trapicheaba con drogas, luego empezó a robar e incluso acabo
asesinando a gente, claro, al poco tiempo murió de Sida.
Y por último, el camino de la vida, hay veces que la vida obliga a muchas personas
a ser delincuentes. Cualquier persona aún no siendo mala persona puede estar
metido en líos, por que la vida le lleva ahí, si una persona lo único que ha
conocido en su vida es delincuencia, peleas y en general líos, no va a poder
salir de ese mundo, por la propia exclusión social.
Pero por suerte, Isaac, hay
personas que tienen todas las papeletas para ser delincuentes, se crean en
ambientes familiares malos, malas compañías, malos barrios, empiezan con
peleas, faltan a clase y de repente, en vez de continuar por ese camino
encuentran el deporte, encarrila su vida al deporte y se hacen incluso
campeones de España.
-Entonces Mario, ¿Por qué
estas personas deciden aliarse con el mundo de la delincuencia?.
-Esto es muy difícil de
averiguar Isaac, mira por qué hay chavales que han sido violados en la infancia
y son personas normales, pueden tener su trauma, pero no hacen daño ni matan a
nadie, sin embargo, otros tienen los mismos problemas y si lo hacen.
Habría que buscar las
circunstancias individuales de cada persona, no creo que exista un patrón
común, sino como cada uno individualmente asume las circunstancias de su vida y
como se le presentan.
Los valores han cambiado, antiguamente se pasaba mucho tiempo con la familia, tus padres te inculcaban respeto, pero ahora, todo esta cambiando, el mundo laboral y social en el que vivimos no permite eso. Y… hoy en día que se valora, pues la sociedad, en la que incluyo internet, tus amigos, tu grupo, el dinero, ect, es más influyente lo que ves fuera que lo que tienes en casa, y después de lo que has visto eres tú quien elige el camino a tomar.
Los valores han cambiado, antiguamente se pasaba mucho tiempo con la familia, tus padres te inculcaban respeto, pero ahora, todo esta cambiando, el mundo laboral y social en el que vivimos no permite eso. Y… hoy en día que se valora, pues la sociedad, en la que incluyo internet, tus amigos, tu grupo, el dinero, ect, es más influyente lo que ves fuera que lo que tienes en casa, y después de lo que has visto eres tú quien elige el camino a tomar.
Ahora mismo una persona
admirada es un tío que gana mucha pasta, aunque sepa todo el mundo que lo roba,
dicen de él “ese es un tío inteligente”. Yo les dijo, no amigo ese es un
“ladrón”, ahora, del que roba una gallina para comer, de este dicen los demás
“ese tío es un imbécil, solo tiene una gallina”.
Que ocurre en los barrios
marginados donde los millones no los tiene nadie, pues que los valores son
otros, los antiguos valores, como la palabra, la valentía, la lealtad y el
honor hacia el grupo, cuando encuentras una persona así, te das cuenta que se
le tiene mucho respeto.
- Mario, igual ¿Hay que
buscar una motivación para poder salir de ese mundo?.
- Voy a utilizar palabras fuertes pare expresar lo que pienso, pero quiero ser claro, estoy convencido que hay
gente que nace “hija de puta”
intrínsecamente “hija de puta”, y
muere “hija de puta”, tienen algo
dentro y lo tienen que sacar por algún lado. Estos normalmente suelen llegar a
ser los líderes, por que les da igual todo, son los peligrosos de verdad.
Hay gente intrínsecamente
mala y no son delincuentes, pienso que se tiene un concepto erróneo de que
todos los que matan son malos y los que no matan son buenos. Puede haber un Juez
que haga la vida imposible a su familia, a sus allegados e incluso en sus
sentencias, en cambio nunca mató a nadie, digamos que para ejercer su maldad
emplea la ley. No todo el mundo que está fuera de la ley es malo, ni todo el
mundo que está dentro de la ley es bueno. Dentro de la maldad y la bondad hay
cosas muy relativas
-Mario, ¿Qué crees que se
podría hacer para que esas personas cambien y no se dediquen al mundo de la
delincuencia?.
-Pues todo lo contrario a
lo que se hace hasta ahora, que es meterles en la cárcel.
La clave está en demostrares de que valen para muchas cosas, y que pueden ser como cualquier otra persona normal, aunque incluso haya que ponerle una persona al lado continuamente que les recuerde que son capaces de hacer lo mismo que los demás, así, esas personas por ellos mismos, se irán dando cuenta que fuera del mundo de la delincuencia no son menos que nadie, que saben realizar muchas cosas y que la sociedad les puede valorar por su esfuerzo, para poder ser alguien de respeto.
La clave está en demostrares de que valen para muchas cosas, y que pueden ser como cualquier otra persona normal, aunque incluso haya que ponerle una persona al lado continuamente que les recuerde que son capaces de hacer lo mismo que los demás, así, esas personas por ellos mismos, se irán dando cuenta que fuera del mundo de la delincuencia no son menos que nadie, que saben realizar muchas cosas y que la sociedad les puede valorar por su esfuerzo, para poder ser alguien de respeto.
Muchas personas que han
vivido en el ambiente de la delincuencia, cuando deciden cambiar no creen en
sus posibilidades, se creen que son una “mierda”, a pesar de que vallan con la
cabeza bien alta.
Para explicarlo mejor, es
como un contra sentido, puesto que cada uno se siente “rey en un determinado
momento”, nos sentimos muy bien en algunas situaciones, mientras que en otras
no tenemos “ni puta idea de nada”. Si nos sacan de nuestro ámbito, de lo que
nosotros dominamos, ya no somos nadie. Somos muy débiles mentales.
El Yoga promueve que vivas
la vida sin “apegos”, porque estos no te dejan vivir tu vida con plenitud. Las
personas de hoy en día tenemos demasiados apegos, esto significa que
necesitamos de muchas cosas, como el dinero o el amor, a su vez estos apegos
generan muchas inseguridades. El afán por satisfacer estos apegos favorece a
que se delinca, por ejemplo, sino te obsesiona el dinero, no robarías ni
matarías por dinero. Somos tremendamente débiles y a la hora de elegir el
camino a seguir muchas veces nos equivocamos, y cuando estas dentro de ese
trayecto es difícil salir, porque por un lado te preguntas “esto que hago es
chungo”, pero por otro lado te recuerdas “aquí me quieren, me apoya, soy
alguien”, ahí está nuestra debilidad. Luego la sociedad no apoya en nada ni a
nadie, no tienes dinero, no estudiaste “que te den por el culo”.
Para concluir Isaac, me
viene a la cabeza una pregunta ¿Por qué hay delincuencia? Para mí la respuesta
es que, de nacimiento los genes influyen, también la familia, los amigos, el
barrio, pero es la sociedad la que te impulsa a convertirte en delincuente,
luego el individuo es el que elige el camino, somos libres de elección.
-Gracias Mario.
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