lunes, 18 de enero de 2016

DISONANCIA COGNOSCITIVA

DISONANCIA COGNOSCITIVA[1].

¿Hay el mismo modo de consistencia entro lo que una persona sabe o cree y lo que hace?

Es sabido como regla general, que una persona sabe que va ha ser severamente castigado si comete un delito, para evitarlo tratara de no cometerlo o de que no le descubran, pero una vez más lo que atrae nuestro interés son las excepciones y no la conducta normal.
Una persona puede saber que fumar es malo y, sin embargo, sigue fumando.
Una persona puede pesar que los negros son iguales que los blancos y, sin embargo, no quiere vivir en su compañía.
Una persona pueden opinar que es malo que sus hijos se porten de forma agresiva y , sin embargo, cuando lo hacen se sienten orgullosos.




¿Qué ocurre cuando estas excepciones vienen a nuestra imaginación?.

Lo normal es tratar estas inconsistencias o disonancias racionalizándolas, intentando buscar una solución, pero no siempre ocurre esto, los intentos por dar consistencia al argumento pueden fracasar.

¿Cómo puede ser que una persona sostenga opiniones o actúen como no es habitual en ellas o se espere de ellas?

Nadie tiene el control completo y perfecto sobre la información que le llega y sobre los acontecimientos que suceden en torno suyo. Hay pocas cosas que sean completamente blancas o negra; pocas situaciones son suficientemente claras para que las opiniones, y las conductas no sean, hasta cierto punto, una mezcla de contradicciones.
Donde se ha de formar una opinión y donde hay que adoptar una decisión es inevitable que surja una disonancia entre la cognición de la acción, las opiniones y el conocimiento de una acción diferente.

No todas las decisiones tienen igual magnitud, un determinante claro es que cuanto mas grande es la valoración de la decisión y de mayor importancia en aquellos elementos relevantes existentes entre la conducta esperada y las consecuencias, mayor será el tiempo en resolver esa disonancia cognoscitiva o comúnmente llamada la elección de la decisión a llevar a cabo.

En resumen el organismo humano trata de establecer una armonía interna, con consistencia o congruencia entre actitudes, opiniones, conocimiento y valores.
A la hora de afrontar la toma de una decisión casi siempre suele haber una disonancia o un periodo de evaluación, valorando las características alternativas como negativas o positivas.
Suele existir una disonancia cognoscitiva después de experimentar una vivencia abiertamente en desacuerdo con la opinión y las consecuencias mediante la oferta de un premio o la amenaza de un castigo.

Isaac Llorente Blanco, respecto a parte del expediente judicial por T. J. 37/ 2015. (León a 18 de enero de 2016)




[1] Idea extraída de la Teoría de la Disonancia Cognoscitiva, por A. Ovejero (1975). Disponible en: http://www.psicothema.com/pdf/873.pdf